La pornografía cómo salir de ese vicio parte 1
Los seres humanos llevan en su interior luz y sabiduría, sin embargo debido al mal uso que se le da a la energía creadora, hemos hecho nuestras propias creaciones, las cuales se conocen como formas de ser, defectos psicológicos, yoes, ignorancia, errores, en conclusión, el ego. El defecto psicológico de la fascinación por la pornografía ha tomado mucha fuerza en los últimos tiempos, este está debilitando a las personas de una manera muy acelerada como nunca se había visto, esta situación se ve como algo normal, en la cual toda persona debe vivir; y se ve en todas partes, así como el alcohol, que se encuentra en cualquier cultura y en cualquier estrato socio económico.
Los niños y jóvenes desde temprana edad se exponen a este material fácilmente debido a la tecnología, para encontrarlo solo hace falta digitar en Google la palabra “pornografía” y se encuentra toda clase de contenido, una vez la persona se engancha con estas escenas no puede dejar de verlas por el placer que se produce y por el variado contenido, en la mayoría de casos la pornografía se convierte en el instructor “distorcionado”de la sexualidad del joven, cambiando de ahí para adelante la percepción de la realidad, contaminando su mente, imaginación y sentimientos.
La pornografía es algo anormal, gozar de ver como otros expulsan la energía creadora sexual y juegan con ella desde el punto de vista del sentido común no tiene ningún sentido valga la redundancia; sin embargo, nuestra carencia de conciencia nos lleva solo a querer sentir placer a través del uso irracional de los sentidos.
Este defecto tarde o temprano se convierte en un vicio, nos volvemos esclavos de la necesidad de ver este tipo de escenas degradantes y violentas, cada vez más fuertes y excitantes, por tanto, la persona se va degenerando en todos los aspectos: la mente anda desequilibrada, trastornada y distraída, la parte emocional cada día más fría, las glándulas sexuales vulneradas a tal punto que se atrofian, el verbo se adultera y la vitalidad se pierde.
Demostrado está por medio de estudios llevados a cabo en Alemania, que la persona pierde masa cerebral si se hace adicto a la pornografía y a la masturbación, y como se sabe siempre hay un inicio, esto no quiere decir que la persona se vuelva menos intelectual, sino que pierde inteligencia, la cual es habilidad de expresar la parte más sublime dentro de sí y sentir el anhelo de despertar la conciencia.
Por otra parte, se sabe que este defecto se asocia a la masturbación (placer al expulsar la energía sexual de manera violenta, atrofiando las glándulas sexuales), situación que debilita la fuerza sexual del individuo; el cerebro al ver todas estas imágenes, las cuales son difíciles de transformar y de asimilar, se da como resultado la inundación orgánica de dopamina, similar a cuando se ingiere droga como cocaína o heroína, es por esta razón que se siente la necesidad de volver a repetir la experiencia, sin embargo las consecuencias no se van a hacer esperar, el cuerpo se va a resentir y los niveles naturales de dopamina se van a bajar por debajo del mínimo causando impotencia sexual, hastío hacia el sexo, depresión, estrés. Este abuso también degrada la glándula pineal la cual al verse tan desequilibrada hace que el individuo se vuelva más materialista en todos los aspectos.
En primera instancia si de verdad se quiere salir de este vicio hay que comprenderlo, para lo cual se formulan las siguientes preguntas:
- ¿Cómo y cuándo inicie este vicio?
- ¿Cómo evolucionó? ¿De qué forma?
- ¿Cuántas veces recurro a este material semanalmente y cuánto tiempo gasto, teniendo en cuenta en que podría haber aprovechado útilmente este tiempo?
- ¿El material que veo hoy en día es más denso que el inicial?
- ¿A qué consecuencias me ha llevado hoy en día?
- ¿Como veo al sexo contrario usualmente?
- ¿Desde hace cuánto tiempo tengo este defecto?
- ¿Si tengo una relación de pareja cómo este defecto psicológico ha influido negativamente?