
Noche de Brujas o Halloween
Aunque el origen primario de esta fecha viene de hace más de 3000 años por los Celtas, lo que podemos ver ahora no tiene nada que ver con su celebración original.
Estas antiguas culturas tenían conocimiento profundo de los misterios de la vida y de la muerte y cuando celebraban la muerte no era la muerte física sino la muerte psicológica: la única muerte que merece ser celebrada, pues es la única que trae paz, libertad y felicidad.
Para comprender esto debemos remitirnos a la Conferencia N° 47 El yo de la brujería, pues así como existen las brujas Blancas que trabajan para el lado positivo, también existen las brujas negras, que trabajan para el lado negativo. Las blancas transmutan su propia energía sexual y las negras pierden su energía y roban la energía sexual de otros.
Las brujas blancas no tenían verrugas ni eran feas como se muestran hoy en día, eran mujeres comunes y corrientes que estaban en su proceso de despertar su fuego sagrado y por tanto, tenían ciertos poderes. La inquisición quemó viva a muchas de estas brujas blancas, conocedoras de los secretos del sabio uso de la energía sexual y del despertar del fuego sagrado. Una de ellas fue Juana de Arco.
En esa celebración se utilizaba la calabaza iluminada o lámpara para ahuyentar los malos espíritus y mantenerlos alejados de las personas y sus hogares. Esto es el símbolo de cómo debemos llevar el fuego a la cabeza o sea el Kundalini hasta la glándula pineal y será este el que nos ilumine el Camino y aleje a las entidades del mal (ego). Sin embargo, ahora se utiliza como una forma de provocar miedo.
Actualmente se ignora todo esto y se han tergiversados todos los mensajes del trabajo revolucionario interior, llevándolo al desarrollo de los más bajos instintos del hombre. Así actúa la logia negra: transformando, confundiendo y adulterando todas las verdaderas enseñanzas del espíritu.
Lo que actualmente conocemos de Halloween tiene origen en EEUU, pero ya es algo que se ve en todo el mundo. Esta fiesta de brujas que actualmente vemos celebrarse en nuestro país, está dirigida al lado negativo de las brujas, o sea a las brujas negras; para que las personas se vinculen con los aspectos de la infrasexualidad que caracteriza a la logia negra.
Las brujas están relacionadas con el proceso de la masturbación y la fornicación.
Las brujas también están relacionadas con las aguas, con la energía creadora sexual; todo el que se masturba tiene sus brujas propias. Las brujas entran en la vida del joven (púber) en el momento que comienza a masturbarse y lo buscan astralmente para ocasionarles poluciones, pues vienen a robarle la energía sexual, son ladronas de esta energía, porque con esa energía que roban ellas se mantienen jóvenes, porque la juventud está en la energía sexual; por eso el que se masturba se debilita (envejece).
A cada muchacho que comienza a masturbarse, las brujas comienzan a asediarlo, si tuviera el sentido de la clarividencia, las vería.
Los que realizan esta práctica de Infrasexualidad (masturbación) en forma más asidua terminan formando los incubos y subcubos, que ya son yoes más grotescos que incitan a estas practicas infrasexuales.
Al decir “Dulce o travesura” en el fondo es lo que ofrece el ego: fornicación o maldad (atentado contra sí mismo o atentado contra los demás). Como dijo Pablo de Tarso: “Todos los pecados fuera del cuerpo son, pero el que fornica, contra su propio cuerpo peca”. Es decir, la fornicación (eyaculación, orgasmo) que se muestra como dulce (agradable, atractivo, “rico”) termina destruyendo a su gestor.
El dulce representa la energía creadora, la emoción del orgasmo.
Las brujas motivan a los niños para llevarlos a la fornicación; la cosa es al revés, aunque los niños son los que piden el dulce, ese dulce (energía sexual) es para las brujas.
No es bueno dejar que los niños participen de estas fiestas porque solo se están ligando con el aspecto negativo de la brujería y quedan vinculados a este tipo de energía que favorece y busca la infrasexualidad.
La logia negra siempre se va presentando como algo que no produce daño, como algo “normal” y hasta entretenido y divertido (recordemos la historia de Pinocho).
Este proceso de lucha contra las brujas, que todo verdadero devoto del Camino debe realizar, va a terminar en la Segunda Iniciación de Misterios Mayores, cuando se crea el Cuerpo Vital Solar (Conferencia N° 10 Los siete cuerpos). Formado este cuerpo, ya las brujas no lo molestan más, porque ya se tiene dominio del elemento agua (que es el elemento de este cuerpo) y la persona regresa al Paraíso.
Todos estos misterios son comprendidos a cabalidad solo por aquellos que llegan estas alturas del Camino. La pelea contra las brujas es para lograr la castidad definitiva (o contra los Zánganos en el caso de las mujeres que quieren alcanzar su castidad).
Recordamos que castidad no es celibato, la castidad es la no fornicación, es la unión sexual sin su derrame, sin eyaculación y sin orgasmo, ése el casto de verdad. El casto es el puro, sin mancha.
El trabajo que cada persona debe hacer con las brujas es muy serio, si queremos acabar con las poluciones (Conferencia N° 46 Cómo controlar las poluciones y caídas sexuales) y las fuerzas inconsciente que llevan a la persona a la masturbación. Si permitimos que este tipo de celebraciones motivadas, diseñadas e influenciadas por la oscuridad, nos atrapan aún más en sus redes; más difícil será mañana poder enfrentarnos a ellas y salir victoriosos en las pruebas de castidad, fidelidad y amor a nuestra pareja que requiere la senda verdadera.
Los disfraces (manera de rendir homenaje al ego) son la forma de exteriorizar el lado oculto de la psicología (el ego perverso y siniestro), así que cada uno se disfraza representando inconscientemente lo que lleva en su interior. Cada disfraz nos refuerza al ego, es la máscara contra la cual debemos luchar y en esta celebración hacemos todo lo contrario, nos divertimos con el ego, lo alimentamos y le damos nuestra energía.
En Halloween, las gentes gustan vestirse de brujas, brujos y magos. Pero ignorando las diferencias entre la magia blanca y la magia negra. Si el ego se disfraza de brujo es un mago negro.
Otros gustan vestirse con trajes de formas monstruosas, desencarnados y vampiros, los moradores de cavernas oscuras y antros de magia negra. Esas formas monstruosas, son las del ego o yo pluralizado, verdaderos monstruos que en nuestro interior cargamos.
Las máscaras y los antifaces de la falsa personalidad, esconden e impiden la manifestación de la esencia y contribuyen a que la conciencia duerma. La variedad de disfraces se corresponde con la multiplicidad del ego o yo psicológico.
En conclusión esta es una fiesta del ego, para el ego y por el ego.
Solo con la eliminación del Ego y la auténtica castidad y sin fornicación, conservando y aprovechando nuestra simiente, podemos sobrevivir el período de oscuridad de esta época, entrar al reino de todos los santos (pues santo es solo aquel que elimina al ego) y luego celebrar victoriosos el día de todos los muertos (la muerte del ego es la única muerte que debe ser celebrada, pues es la verdadera liberación).
También estas fechas relacionadas con el trabajo interior (Tres Montañas) han sido tergiversadas y se nos hace celebrar los santos externos sin comprender la forma de alcanzar nuestra propia santidad y se nos hace celebrar o recordar la muerte de los parientes difuntos, haciendo que las gentes visiten los cementerios, que como sabemos son también antros de magia negra. Dichoso aquel que celebre la muerte de su propio ego, pues a la muerte se le vence con la muerte por toda una eternidad.
En Conocimiento de sí mismo enseñamos el Sabio uso de la energía sexual y por eso se advierte todo este proceso del robo de la energía por parte de las brujas, y como en participación casi “inocente o por diversión” nos vamos conectando con el inconsciente y los mensajes subliminales de la pérdida de la energía sexual y el miedo o terror que estos disfraces producen, notoria o subliminalmente.